En Tóestábueno intentamos controlarnos a la hora de comer guarrindongadas, pero es muy difícil. De vez en cuando sale el monstruo que llevamos dentro y nos ponemos hasta el ojete de chucherías y paquetes de palomitas. Es muy triste ver como nos peleamos por comernos las chispitas crujientes que quedan en el fondo del paquete...
En fin, que después de pensar mucho en hacer mis propios snacks grasientos, decidí empezar por mis favoritos: los nachos sabor tex-mex, los Doritos vamos.
Fue completamente experimental, y al principio no me imaginaba que el sabor de la salsa hecha en casa pudiera parecerse tanto a la de los paquetes, pero así es.
Las tortillas que venden para burritos quedan un poco más gruesas que las que venden ya fritas y saborizadas, pero lejos de ser un inconveniente diría que eso es lo mejor: más consistencia para coger guacamole o queso fundido o la salsa que queráis.
Esperamos que os gusten.
Ingredientes:
-5 tortillas para burritos
-1 diente de ajo pequeño
-1/4 de cebolla pequeña
-1 cucharadita de pimentón
-la puntita de la cucharita de cayena molina (o al gusto de cada uno)
-una cucharada de vinagre
-dos cucharadas de aceite de oliva
-sal al gusto
-aceite de girasol para freir
1-En un mortero ponemos el ajo y la cebolla picadas, el pimentón, la cayena y la sal. Majamos muy bien y cuando tengamos una pasta añadimos el vinagre y el aceite. Mezclamos bien.
2-Cortar cada tortilla en ocho trozos iguales, freír en aceite de girasol y recién sacadas del aceite las pintamos con la mezcla anterior.
3-Dejamos que se enfríen y a disfrutar.
Sara en plena investigación culinaria
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